La región gobernada por Díaz Ayuso combate la ocupación y el control de precios
Ayuntamiento y Gobierno autonómico evitan el intervencionismo y elevan la oferta
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, clausuró la segunda y última parte de la Gran Jornada Inmobiliaria de elEconomista situando a este sector entre los ámbitos económicos “estratégicos”. Los hechos respaldan las palabras de la presidenta, quien anunció una medida tan innovadora y oportuna como la creación de la oficina Madrid 112 Antiocupación, que coordinará todas las políticas para evitar el asaltos de inmuebles privados o públicos, y a la que podrán recurrir los afectados por estos atentados a sus propiedades.
Madrid lleva largo tiempo distinguiéndose por la firmeza con la que persigue este problema, como evidencia el hecho de que presenta un número de inmuebles ocupados seis veces inferior al propio de Cataluña.
Ahora, además de prevenir los allanamientos de morada, contribuirá a acabar con la desprotección en la que sumen quienes ya los han sufrido; ellos son las víctimas de una respuesta demasiado lenta por parte de las Administraciones.
En paralelo, el compromiso de la presidenta con la seguridad jurídica en el inmobiliario llega más lejos. Sus críticas a los controles de precios en mercados como el propio del alquiler son necesarias. Ese intervencionismo sólo encarecerá los arrendamientos y empobrecerá a las clases medias.
Las políticas de vivienda efectivas son las que incrementan la oferta y ése es el objetivo del Plan Vive del Gobierno regional, de Madrid Nuevo Norte y de las casi 1.200 viviendas públicas en las que invertirá el Ayuntamiento de la capital, como anunció, también en la Gran Jornada, el alcalde José Luis Martínez-Almeida.
Madrid ofrece así la estabilidad legislativa y el impulso necesarios para reafirmarse como el gran polo de atracción de las inversiones inmobiliarias en España.